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XV
El
Patio de mi Casa. Llega la pubertad
El
tiempo fue transcurriendo y el general, creció en edad y en estatura.
La asistencia a la escuela, aquella de la única Enciclopedia que todo lo
sabia, le abrió nuevos horizontes. La inocencia primitiva, fue desplazada
paulatinamente, por los conocimientos y ciencias que los compañeros le
aportaban.
La relación con sus primos y con los demás niños vecinos, se hizo aun
mas estrecha, Bueno con las niñas, lo fue más.
Los juegos comunes, se realizaban siempre con aquellos en los cuales,
había que esconderse. ¿Por qué les gustaba tanto a las niñas el escondite?
Le pregunte al general y encogiendo sus hombros, dijo ¡ yo que se! ¡ Hábil
estrategia, majo!
Era el general el mayor en edad y estatura, y la mayoría de las niñas,
caían sobre el, entre risas nerviosas, en cuanto se escondía tumbado en el
suelo
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metido en una tinaja, de la casa de “borreguitas”.
Las niñas mas avanzadas física y mentalmente que el, le proponían juegos
muy extraños con médicos o papas y mamas.
Pensaba el general, que eran cosas muy serias como para jugar con ellas.
De todas maneras, se dejo hacer y en realidad, no estaba tan mal. De ahí,
comenzó la Seguridad Social en España.
Nunca se paso a mayores;…
¡Oye narrador ¡ Qué es pasarse a mayores?,
¡Calla nene¡, ya te enteras cuando lo estudies en la Enciclopedia.
Decía, que todo era diáfano y sin maldad; muy académico, diría yo.
¡Pues valla un narrador cursi, a mi me tocaban el culo,…!
¿Te
quieres callar?, ¿no ves que esto lo leen señoras?
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